Nacional dio vuelta un partido complicadísimo y con un empate en el que viene es campeón. El equipo de Pelusso la viene remando desde hace tiempo, atropelló la ventaja de Defensor y por primera vez puede jugar con el resultado. ¿Liquida el miércoles?

Suerte que el esfuerzo y el ángulo de definición lo dejaron tirado en el piso. Suerte que enseguida llegaron sus compañeros para taparlo y armarle la montonera encima. Es que por más respetuoso que sea, a Biscayzacú se le hubiera escapado un grito después del segundo gol. No era un gol cualquiera: el partido se cerraba en empate y su zurdazo selló la remontada que deja a Nacional a un empate del título. Una remontada que no empezó con el cabezazo de Coates sino que viene desde el comienzo de esta absurda aventura llamada “Finales del Uruguayo”.



Defensor ganó la Anual, salió con handicap y siempre supo que tenía un mañana. Ahora el alivio de la especulación se le escurrió de las manos. La primera final la dejó pasar, la segunda no la supo liquidar, la tercera quedó en un penal y la cuarta lo dejó mordiendo el piso. Quedó dando vueltas en el torbellino que deja el paso de un tren. Ese tren se llama Nacional y viene acumulando viento desde hace rato.



El Bolso no tomó los dos empates como una prolongación de su angustia sino como una oportunidad perdida por su rival. Tuvo una postura clara: cada final que pasa achica la desventaja del inicio. Por eso salió siempre con mente firme y físico arrojado. El domingo no hizo más que certificarlo. Promediando el segundo tiempo quedó 0-1 por primera vez en esta definición. Sin minutos para digerir el festejo de Pintos (otra vez figura), se sacudió bien rápido y salió a darlo vuelta. Lo hizo con ese zurdazo que dejó a Biscayzacú, para su suerte, mirando el pasto.



Antes el partido había sido parejo. Los dos se conocen demasiado. Por más cambio de nombres o estrategias, ya no tienen nada por esconder ni mucho por sorprender. Jugaron su cuarto partido en tres semanas y es extraño que jamás haya habido una escaramuza. Resulta más extraño que un tipo tranquilo como Silva haya iniciado una. Al capitán se le escapó la tortuga y se fue expulsado con Medina. La doble roja benefició a Nacional, a la corta y a la larga: Medina es importante pero no tanto como Silva en Defensor. Fernado Rodríguez entró y rindió, pero no tuvo el aura salvadora de su titular.


Ahora la Viola mira el panorama desde una posición que nunca tuvo ni quiso tener. Tal vez reaccione y pueda sacar un triunfo. Pero enfrente tiene un rival que lo corrió, lo alcanzó y lo pasó. Dicen que el que viene de atrás termina llegando primero.



Defensor Sporting: Martín Silva (45´Fernando Rodríguez), Pablo Pintos, Jorge Curbelo, Mario Risso, Sebastián Ariosa (87´Brian Alemán), Pablo Gaglianone, Miguel Amado, Carlos Díaz; Rodrigo Mora, Alvaro Navarro (64´ Nasa), Diego Vera
DT: Jorge Da Silva


Nacional: Rodrigo Muñoz, Matías Rodríguez (73´Gustavo Biscayzacú), Mauricio Victorino, Sebastián Coates, Adrián Romero (87´Roberto Brum), Álvaro Fernández, Oscar Javier Morales, Diego Arismendi (68´Ángel Morales), Nicolás Lodeiro, Santiago García. Alexander Medina
DT: Gerardo Pelusso


Goles: 66´Pablo Pintos (D), 78´Sebastián Coates (N), 86´Gustavo Biscayzacú (N)
Rojas: 45´Martín Silva (D), Alexander Medina (N)


Cancha: Estadio Centenario
Jueces: Martín Vázquez, Pablo Fandiño y Alvaro Sacarelo