Le dicen el Loco con razón. Abreu ganó el Carioca picándola contra el gigante Flamengo en el Maracaná. Botafogo lo adora y él aclara que no le copió a Zidane.
Goles en la final de la Taca Guanabará y la Taca Río. Abreu mojó en ambas y así le dio el Carioca número 19 al Botafogo. Este domingo, en un Maracaná rebozante, puso el 2-1 picándosela a Bruno, uno de los mejores arqueros del fútbol brasileño.
Fue el gol del campeonato estadual ante el campeón actual del Brasileirao, con Adriano y Wagner Love en cancha. Y claro, como la pelota dio en el travesaño todos le preguntaron al 13 si se había inspirado en Zinedine Zidane y su precioso 1-0 contra Italia en la final del Mundial 2006.
"No, lo hago desde hace tiempo, e incluso lo hice contra Brasil en la semifinal de la Copa América 2007", aclaró, en referencia a la definición por penales en donde se la picó a Doni.
Y agregó porqué patea así. "No menosprecio ni le falto el respeto al rival. Es una forma segura de hacer el gol. Algunos le pegan fuerte, otros esperan los movimientos del arquero, lo importante es que la pelota entre. Si entra, está todo bien", explicó.
Abreu vivió como nunca este festejo: fue siempre titular, referente y goleador, gritando 14 veces entre Guanabará y Río. Sus cuatro hijos dieron la vuelta olímpica con él en el Maracaná, mientras el Loco, fiel a su costumbre tecno, filmaba todo con una camarita.
Nuevo ídolo del Botafogo, el delantero volvió a sostener que la llegada de Joel Santana como DT fue clave. "Crecimos con el correr de los partidos y acá estamos. Nadie esperaba que ganáramos ambas copas", se mofó.
Después a festejar a una churrascaria de Barra da Tijuca, al oeste de Río de Janeiro, siempre pensando en Sudáfrica 2010. "Hay que fijarse en el primer juego con Francia antes que nada. Yo llegó bien, entrenando y jugando en un equipo campeón. Esperemos que todo salga bien", cerró.
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