Risas van, risas vienen, Mario Regueiro entrenó por primera vez con el grupo principal para estar a la orden el sábado. La "Hiena" volvió a su casa y dijo unas cuantas cosas tras la primera práctica.

¿Cómo encontraste tu "casa"?
Tan cambiado no está el vestuario. Hace un tiempo corto estuve entrenando con ellos y la verdad que me recibió muy bien la gente.

Muchas caras conocidas...
Hay mucha gente amiga en el vestuario, gente joven y mayor. Eso es bueno
para formar un buen grupo y hacer un buen año tirando todos para el mismo
lado.

¿Nacional te da la mejor sonrisa?
La sonrisa viene porque hago lo que más quiero y me gusta: jugar al fútbol.
Cuando volvés a un club que tanto te quiere y donde hay tantos amigos, a uno
lo deja contento.

¿Por Nacional se dejó mucho dinero de lado?
Resigné muchas cosas, no solo dinero. Muchos amigos quedaron en Europa,
estaba muy feliz allá, pero no apareció nada que me llene de ganas de
quedarme ahí y por eso decidí dar la vuelta.

¿Regueiro es un jugador diferente para el medio?
No sé. Sí soy un jugador que viene con muchas ganas de jugar, de demostrar
que todavía puede dar muchas cosas. El tiempo dirá si hice la diferencia o no.

¿Venís para quedarte?
Uno nunca sabe. Yo volví para jugar porque quiero ser el jugador de un tiempo atrás y después veré si es para quedarse o volver a irme.

¿Esta vuelta abre las puertas de la Selección nuevamente?
La Selección ya está para mí. Con este cuerpo técnico mi ciclo en la Selección
ya lo cerré. Ellos tienen su idea, su grupo y creo que la gente que no le gustaba, la dejaron de lado. Decidí dar un paso al costado en una decisión muy pensada.

¿Estás dolido por eso?
No. Sigo siendo feliz, sigo alentando a la selección. Las cosas cuando
vienen señaladas en un cuerpo técnico con una lista negra, lo mejor es
dar un paso al costado.

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