A Matías Rodríguez le pueden dar cualquier zona de la cancha...

Muñoz. Gracias a sus increíbles reflejos, evitó un gol de Hernán Figueredo en el primer tiempo. Le ganó un mano a mano a Figueroa y segundos antes del gol de Alfaro le tapó el tanto a Patritti.

Núñez. Le cerraron bien los caminos para que se proyectara y su juego terminó siendo poco productivo.

Lembo. Tiene una estrella especial con Nacional. Fue seguro en el fondo y en la otra área metió el gol del triunfo.

M. Rodríguez. Cada día que pasa se muestra más importante. Veloz, dinámico, firme en la marca, temple para irse arriba y gol. Un zaguero muy moderno.

Aranda. Concedió enormes ventajas y por ahí Liverpool complicó muchísimo a Nacional.

O. Morales. Empezó entreverado con la pelota, después se afirmó y cuando el equipo lo precisó apareció con su enorme personalidad.

Guigou. Lento e impreciso en el medio. Mejoró con más visión de campo cuando pasó al lateral.

Cabrera. Nervioso y muy apurado con la pelota.

A. Morales. Se prendió mejor en la segunda mitad.

Vera. Peleó todas.

Regueiro. Lo controlaron bien, igual hizo alguna jugada.

Blanco. Relevante para que Nacional fuera más agresivo.

A. González. Más vértigo y mejor profundización del juego.

Balsas. Aportó juego aéreo.

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