Posted by Publicadas por NINO

Como ya lo dije anteriormente en un post que publique, la manija de algunos representantes de la prensa como en el año 1997 es notoria, palabras como “juego limpio”, “honestidad”, “ética” salen de la boca de muchos hombres de la prensa y el ámbito futbolístico; y como “calientan” estas cosas.... porque son tantos los hechos que demuestran falta de todos esos valores en muchos que hoy se rasgan las vestiduras para decir que NACIONAL no tendría estos valores si pone un equipo que facilite las cosas a DEFENSOR.
Quiero publicar este articulo de la pagina EL DECANO que refleja claramente una situación que da “asco”.... como comparto en todo este articulo se los reproduzco para quienes visitan mi blog lo puedan leer.



La viga en el ojo propio...

www.decano.com l 24/04/07


Los tres pitazos de Carlos Aguirregaray que pusieron fin al partido entre Nacional y Liverpool el pasado domingo, no solamente sirvieron para sellar una nueva victoria tricolor en el torneo local. Sirvieron también para dar inicio a una lluvia de consideraciones, tan fuerte como la que anegó el Centenario, sobre qué tiene que hacer o no hacer Nacional en su próximo partido contra Defensor Sporting, válido por la duodécima fecha del Clausura y previo al clásico.

Desde ese momento, el discurso dominante en la prensa deportiva local ha incluido no sólo una amplia gama de opiniones al respecto, sino, además, hasta amenazas de abandonar la profesión a cargo de algún connotado periodista deportivo, si Nacional no hace en ese partido lo que ellos consideran debe hacer. Todas esas opiniones se caracterizan por la cerrada defensa de la honestidad, la ética y la moral en el deporte y las apelaciones (casi exigencias) a la honestidad hacia quienes saltarán a la cancha del Franzini en el día de mañana. Las mismas serían absolutamente compartibles si no provinieran de uno de los sectores más desacreditados del fútbol uruguayo, como es la prensa “especializada”.

Hace algunos años, la empresa Tenfield adquirió los derechos de televisación de los partidos del fútbol local. Como consecuencia, los más destacados integrantes de la prensa deportiva televisiva comenzaron una cruzada en defensa de las libertades de expresión y de prensa, gesto que brilló por su ausencia durante décadas, es decir, mientras los empleadores de esos mismos periodistas, cabezas del oligopolio de la televisión en el Uruguay, podían emitir las imágenes del fútbol uruguayo sin pagar canon alguno. Bastó que muchos de esos mismos profesionales pasaran a desempeñarse dentro de la empresa que había adquirido los derechos de televisión, suculentas remuneraciones de por medio, para que olvidaran su defensa de las libertades.

La década del ’60, durante la cual el tradicional rival comenzó a trascender internacionalmente, fue generosa en embates a la “honestidad deportiva”. Baste recordar la compra de localías en la Libertadores del año ´60 o el sospechoso rendimiento de sus futbolistas en la edición del mismo torneo correspondiente al año 1965. Sin embargo, a la hora del análisis, la década del ’60 es, para los adalides de la honestidad, un canto al espíritu deportivo, digna herencia del Barón Pierre de Coubertain. En todo caso, esos “deslices” de dirigentes o futbolistas son vistos, con benevolente complicidad, como gestos cabales de “viveza criolla” o “capacidad dirigencial”.

Sin ir tan lejos, en el año 1997, cuando el reglamento del Campeonato Uruguayo fue modificado en medio de su disputa para favorecer los intereses del club que en ese momento se estaba jugando un quinquenio, ningún periodista amenazó con renunciar a su profesión. Casualmente, ese club es el mismo que desde el año 2003 no ve ingresar copa alguna a sus vitrinas, el mismo que actualmente comanda el Torneo Clausura y el mismo que, de acuerdo a lo publicado por el mismo periodista que ahora blande su amenaza de renuncia, concita el partidarismo del 62% de los periodistas deportivos uruguayos.

Más cerca aún en el tiempo, cabe recordar el asesinato del parcial de Cerro Héctor Da Cunha, a manos de una patota de hinchas del tradicional rival, ya hace más de un año. Las investigaciones policiales han registrado avances, pero el crimen, con el agravante de haber sido perpetrado delante de los ojos de la esposa y el hijo de la víctima, sigue impune. Ningún periodista deportivo amenazó jamás con renunciar si la Justicia no identificaba y sancionaba a los criminales.

Una lista exhaustiva de ejemplos sobre la disparidad de criterios que caracteriza el discurso dominante en la prensa deportiva local, no sólo sería imposible de elaborar, sino que cansaría al más paciente de los lectores. Los antes mencionados son una simple muestra, que no por breve deja de ser representativa. De modo que los adalides de la honestidad, bien harían en mirarse al espejo. Quizás así, antes que la paja en el ojo ajeno, verían la viga en el propio.

|
Image Hosted by ImageShack.us

Ingrese su dirección de email:

Delivered by FeedBurner

Image Hosted by ImageShack.us